Enviado por Anónimo (no verificado) el Lun, 05/05/2014 - 10:30am
Expertos aplauden convocatoria de Colciencias, pero insisten en las dificultades de un posdoctorado.
Regresar a Colombia. Esa idea asalta las mentes de 900 doctores colombianos que viven en diferentes lugares del mundo, menos en su tierra natal. Cada científico espera obtener uno de los 200 cupos que Colciencias ofrece para retornar al país y lograr su posdoctorado.
Los 200 doctores que sean elegidos en la convocatoria 'Es tiempo de volver' serán vinculados durante dos años a universidades, centros de investigación, entidades y empresas privadas del país; y cada proyecto de investigación será financiado con 150 millones de pesos, entregados por Colciencias o los sectores público y privado.
"Ningún investigador en este país tiene asegurado el dinero para hacer investigación. Todos tienen que concursar por los fondos de Colciencias. Estos doctores tendrán el dinero para viajar, publicar, escribir libros", afirma Paula Arias, directora de Colciencias.
La Fundación Cardiovascular es una de las instituciones que abrirá sus puertas a los científicos nacionales. Su directora de Investigaciones, Norma Serrano, aplaude que Colciencias aporte seis millones de pesos al salario que recibe cada investigador, el cual puede ser mayor si la institución lo decide. Arias explica que serán seis millones de pesos, más prestaciones. "Su salario estará exento de renta. Colciencias paga la seguridad social y un seguro de vida", agrega.
La iniciativa que, según Arias, se realiza por primera vez en el país, tiene otros privilegios: tiquete de regreso gratuito, facilidades para comprar casa y carro, tarjetas débito y de crédito preactivadas, afiliación a una caja de compensación familiar y hasta boletas para asistir al próximo Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá."Logramos armar un grupo muy generoso de empresas del país que están esperanzadas e interesadas en que nuestros doctores regresen", subraya Arias, quien también se refiere a la posible acogida de doctores que a partir de sus patentes quieran hacer empresa en Colombia.
¿Una convocatoria solo para jóvenes?
Aunque la convocatoria exigía a sus postulados ser doctores, 'Es tiempo de volver' motivó también a 9.100 colombianos que estudiaron maestrías en el exterior, donde se dedican a la actividad científica.
Andreas Trepte, quien en América Latina dirige Max Planck Society -una red de institutos de investigación científica en Alemania-, opina que la convocatoria de Colciencias atrae principalmente a los doctores jóvenes, quienes -considera- son "más flexibles". "¿Qué son dos años para un doctor que tiene una familia y una muy buena posición en Londres, por ejemplo? Un financiamiento garantizado de dos años en Colombia no basta", comenta.
"Hay colombianos en nuestros institutos que son mucho más cualificados que los doctores jóvenes. Llevan cinco, seis, siete años en el extranjero. Para ellos se necesitan otros instrumentos. Estos doctores también tienen ganas de volver a su patria, a su familia, pero el retorno es un riesgo cuando se tienen responsabilidades con sus hijos y su esposa, y cuando, quizá, se tiene una vida bastante buena en el exterior", añade.
Al respecto, Arias aclara que un posdoctorado en cualquier país demora dos años. "Si son realmente buenos van a encontrar oportunidades para quedarse más tiempo en Colombia", apunta.
En el mismo sentido habla la representante de la Fundación Cardiovascular: "La idea es que una vez culmine la ayuda, la institución no deje ir al doctor. No haríamos nada. Investigación de dos años no se hace, la investigación es a largo plazo".
Colombia vs. países desarrollados
Algunos científicos consideran atractiva la campaña que emprende Colciencias para repatriar a los doctores, pero creen que ese esfuerzo no es suficiente. Es el caso de Iván Darío Vélez, director del Programa de Estudio y Control de Enfermedades Tropicales (Pecet), de la Universidad de Antioquia.
"Es cierto que los colombianos que están en el exterior, en su inmensa mayoría, aman su país y quieren regresar y trabajar por Colombia, pero un doctor que está vinculado a un centro de investigación del exterior encontrará que retornar al país no le permitirá desarrollar su investigación científica en las condiciones en que lo estaba haciendo. Se requieren cambios estructurales y políticas públicas de ciencia y tecnología que logren el avance de la investigación en el país", sugiere.
Vélez recuerda las historias que viven algunos de sus estudiantes. "Los mandamos al exterior para que hagan sus doctorados. Tienen becas crédito. Cuando regresan al país están debiendo 100, 200, 300 millones de pesos. Si están con suerte, los vincularán a la universidad con unos contratos a término fijo, donde están ganando dos o dos millones y medio. Esa persona que tiene esa deuda, que terminó su doctorado y que está en una edad en la que aspira tener su propio apartamento, su carro, casarse, va a tener un salario tan malo que no lo permitirá ni pagar la deuda ni menos cumplir sus sueños".
El médico señala que muchos profesionales que atraviesan esa situación "son muy buenos y tienen ofrecimientos en el exterior". "Allá van a ganar más, van a tener más estabilidad, y sobre todo, van a poder desarrollar la investigación sin tantos problemas", dice.
Algunos investigadores retornaron al país sin ser motivados por una convocatoria. Vélez conoce dos casos que no han contado con suerte. Los científicos estudiaron sus doctorados en Inglaterra y Estados Unidos, pero hace más de ocho meses esperan que una universidad colombiana los vincule. El experto narra que él les paga a esos investigadores por proyecto, pero que lo ideal sería que uno de sus proyectos ganara una convocatoria de Colciencias, una opción que ven difícil. "Colciencias solo puede aprobar el 10 por ciento de todo lo que se presenta, porque no alcanza el presupuesto", lamenta.
No obstante, Vélez aclara que 'no todo es color rosa' en el extranjero. "Muchas veces las oportunidades de trabajo en el exterior tampoco son buenas. Les toca hacer cursitos o contraticos de posdoc. El que está en esa situación dice: 'Mejor me voy del país y trabajo de profesor en la universidad'; o también, recientemente, empresas contratan a los doctores para hacer investigación. Eso lo veo en Medellín. Es un fenómeno muy positivo, que apenas está comenzando".
Rodrigo Moraes Abreu, secretario de la Embajada de Brasil en Colombia, encargado de los asuntos relacionados con ciencia y tecnología, coincide con Vélez al afirmar que si el país "fortalece sus instituciones de investigación, la tendencia natural de la gente es que vuelva. Harán lo que les gusta y cerca a la gente que quieren".
Recuerda cómo Brasil llegó a formar al año 55.000 maestros y doctores. "Como país en desarrollo, Brasil, igual que Colombia y muchos otros países, por décadas no tuvo las condiciones de trabajo adecuadas para sus científicos e investigadores. Desde el 2003 el gobierno brasileño hizo esfuerzos muy grandes para reforzar la estructura de formación de capital humano y crear condiciones para que los científicos brasileños regresaran al país. Entre el 2003 y el 2013, Brasil pasó de un promedio de 10.000 maestros y doctores al año, a más de 55.000. Fue un salto muy grande. Este número sigue creciendo a través del programa 'Ciencia sin fronteras'".
El reto: los doctores formados en Colombia
Colciencias financia mil doctorados anuales con más del 60 por ciento de su presupuesto. La entidad busca llegar a los 20.000 doctorados, pero hasta ahora solo se acerca a los 9.000.
Arias asegura que otro de sus objetivos para el 2015 es que "dependiendo del presupuesto que dé el Gobierno a Colciencias, se puedan abrir las puertas a nuevas opciones de trabajo para los doctores que están en el país".
Al respecto, algunos científicos afirman que la convocatoria es positiva porque traerá los doctores que la industria colombiana busca, ya que, en su criterio, los doctores formados en Colombia no cumplen todas las exigencias. Así opina Jorge Hernando Panqueva, director de la Corporación para la Investigación de la Corrosión.
"Los doctores nuestros no han logrado el nivel internacional que requiere la industria colombiana que necesita doctores. En la corporación hemos tenido doctores y la experiencia no ha sido buena, los resultados que obtenemos con profesionales de pregrado son mejores, y hay un compromiso mayor de los jóvenes. Hemos tenido casos sorprendentes en los cuales un doctor comete errores que identifica un ingeniero o un físico", alega.
Panqueva vaticina que los doctores colombianos formados en el exterior "pueden lograr fácilmente llegar a las empresas del país y ser exitosos". Cuenta que no esperaba que doctores que conoce participaran en la convocatoria. "Imaginaba que la mayoría correspondería a recién egresados. Conozco dos personas que estudiaron en Estados Unidos y Europa, trabajan allí hace cuatro o cinco años, y concursaron. Ellos ven algunas posibilidades a su favor".
Pero, ¿qué podría fallar en la formación de los doctores nacionales? Para el investigador, el problema radica en las universidades. "Las universidades dicen que la industria no contrata a los doctores, pero eso no es cierto. Lo que sucede es que los doctores que están sacando las universidades son doctores académicos, para la universidad, no para la industria, lo cual sí se hace en el exterior. Por esa razón puede ser interesante esta experiencia que implementa Colciencias".
Sobre las debilidades que perjudican a los doctores nacionales, la directora de Colciencias reconoce que durante el proceso de asignación de becas para estudiar en universidades acreditadas y financiadas por esa entidad, persiste una "talanquera" con el idioma inglés.
Un cambio de mentalidad
El regreso de 200 doctores colombianos a su país tiene una lectura optimista.
"Es un paso muy importante. Es una señal de que Colombia reconoce que esos talentos son necesarios para su desarrollo. El país está en transformación y necesita muchos expertos. Aquí se ven muchos extranjeros como consejeros porque faltan los nacionales", afirma el alemán Andreas Trepte.
Este investigador sugiere al país estudiar las experiencias de repatriación de doctores en países como Argentina. "Los argentinos empezaron mucho más temprano que los colombianos con un programa para repatriar científicos argentinos que viven en el extranjero. El programa se llama 'Raíces'. Chile está en la misma situación de Colombia, discutiendo el tema. Perú también está diseñando un programa. Es un fenómeno en todos los países latinoamericanos, muchos de sus jóvenes se fueron a estudiar al extranjero y allí se quedaron", precisa.
Ante las 10.000 hojas de vida que buscaron ganarse un tiquete de regreso a Colombia, la directora de Colciencias indica que la convocatoria reconoce la transformación que ha tenido el país en los últimos diez años. "Este era un país para irse, por el conflicto o la falta de oportunidades. Hoy, si los extranjeros vienen, también queremos que vuelvan los nuestros".
MARÍA DEL PILAR CAMARGO CRUZ
REDACCIÓN ELTIEMPO.COM
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Fuente: El Tiempo.com