Enviado por Anónimo (no verificado) el Dom, 20/07/2014 - 11:13am
Además, el constitutivo firmado contempla un intercambio de experiencias en financiación a la innovación y la posibilidad de cofinanciar proyectos de desarrollo tecnológico de “áreas de intereses mutuos”.
En ese sentido, la mandataria brasileña indicó que “el primer presidente del banco será de la India, la primera oficina regional será en Sudáfrica y la sede será en Shanghái”, lo que refleja el compromiso de cada uno de los miembros del bloque.
Por su parte, el presidente de la Asociación Empresarial de la Brics Business Council, Rubens de la Rosa, mostró optimismo por la creación del Banco de Desarrollo, pero solicitó que la nueva entidad contemple el cambio de moneda directa entre las cinco mayores economías emergentes del mundo para abaratar los costos de transacción.
“La idea es que si tengo que hacer una remesa a India no tenga que convertir los reales a dólares y después a rupias”, comentó el representante de los empresarios.
Argentina aplaude
Jorge Capitanich, jefe del Gabinete de Argentina, país del que se especula un deseo de ingresar al bloque, aplaudió la decisión de crear una entidad de fomento propio.
“Necesitamos bancos de desarrollo que se erijan como herramientas para el financiamiento de obras de infraestructura y para aumentar competitividad. No como herramienta extorsiva de los países más desarrollados”, dijo Capitanich en su participación en el foro de los Brics.
Preocupados por la economía
Los ministros de Comercio de los Brics expresaron ayer su preocupación por el “lento proceso de recuperación” de la economía global y por las respuestas de política económica de los países desarrollados.
“Observamos incertidumbres relacionadas al crecimiento económico y a las respuestas de política económica que pueden llevar a un aumento de la volatilidad del mercado financiero y causar repercusiones no deseadas de la economía”, afirma un comunicado conjunto de los ministros de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, reunidos en Fortaleza, en el que no aludieron directamente a la retirada progresiva de estímulos de la Reserva Federal de EE.UU.